12.23.2010
12.18.2010
12.08.2010
Discurso de Mario Vargas Llosa (Premio Nobel 2010)
Toda la vida he tenido a mi lado gentes así, que me querían y alentaban, y me contagiaban su fe cuando dudaba. Gracias a ellos y, sin duda, también, a mi terquedad y algo de suerte, he podido dedicar buena parte de mi tiempo a esta pasión, vicio y maravilla que es escribir, crear una vida paralela donde refugiarnos contra la adversidad, que vuelve natural lo extraordinario y extraordinario lo natural, disipa el caos, embellece lo feo, eterniza el instante y torna la muerte un espectáculo pasajero.
No era fácil escribir historias. Al volverse palabras, los proyectos se marchitaban en el papel y las ideas e imágenes desfallecían. ¿Cómo reanimarlos? Por fortuna, allí estaban los maestros para aprender de ellos y seguir su ejemplo. Flaubert me enseñó que el talento es una disciplina tenaz y una larga paciencia. Faulkner, que es la forma -la escritura y la estructura- lo que engrandece o empequeñece los temas. Martorell, Cervantes, Dickens, Balzac, Tolstoi, Conrad, Thomas Mann, que el número y la ambición son tan importantes en una novela como la destreza estilística y la estrategia narrativa. Sartre, que las palabras son actos y que una novela, una obra de teatro, un ensayo, comprometidos con la actualidad y las mejores opciones, pueden cambiar el curso de la historia. Camus y Orwell, que una literatura desprovista de moral es inhumana y Malraux que el heroísmo y la épica cabían en la actualidad tanto como en el tiempo de los argonautas, la Odisea y la Ilíada.
Si convocara en este discurso a todos los escritores a los que debo algo o mucho sus sombras nos sumirían en la oscuridad. Son innumerables. Además de revelarme los secretos del oficio de contar, me hicieron explorar los abismos de lo humano, admirar sus hazañas y horrorizarme con sus desvaríos. Fueron los amigos más serviciales, los animadores de mi vocación, en cuyos libros descubrí que, aun en las peores circunstancias, hay esperanzas y que vale la pena vivir, aunque fuera sólo porque sin la vida no podríamos leer ni fantasear historias.
Algunas veces me pregunté si en países como el mío, con escasos lectores y tantos pobres, analfabetos e injusticias, donde la cultura era privilegio de tan pocos, escribir no era un lujo solipsista. Pero estas dudas nunca asfixiaron mi vocación y seguí siempre escribiendo, incluso en aquellos períodos en que los trabajos alimenticios absorbían casi todo mi tiempo. Creo que hice lo justo, pues, si para que la literatura florezca en una sociedad fuera requisito alcanzar primero la alta cultura, la libertad, la prosperidad y la justicia, ella no hubiera existido nunca.
Por el contrario, gracias a la literatura, a las conciencias que formó, a los deseos y anhelos que inspiró, al desencanto de lo real con que volvemos del viaje a una bella fantasía, la civilización es ahora menos cruel que cuando los contadores de cuentos comenzaron a humanizar la vida con sus fábulas. Seríamos peores de lo que somos sin los buenos libros que leímos, más conformistas, menos inquietos e insumisos y el espíritu crítico, motor del progreso, ni siquiera existiría. Igual que escribir, leer es protestar contra las insuficiencias de la vida. Quien busca en la ficción lo que no tiene, dice, sin necesidad de decirlo, ni siquiera saberlo, que la vida tal como es no nos basta para colmar nuestra sed de absoluto, fundamento de la condición humana, y que debería ser mejor. Inventamos las ficciones para poder vivir de alguna manera las muchas vidas que quisiéramos tener cuando apenas disponemos de una sola.
Sin las ficciones seríamos menos conscientes de la importancia de la libertad para que la vida sea vivible y del infierno en que se convierte cuando es conculcada por un tirano, una ideología o una religión. Quienes dudan de que la literatura, además de sumirnos en el sueño de la belleza y la felicidad, nos alerta contra toda forma de opresión, pregúntense por qué todos los regímenes empeñados en controlar la conducta de los ciudadanos de la cuna a la tumba, la temen tanto que establecen sistemas de censura para reprimirla y vigilan con tanta suspicacia a los escritores independientes.
Lo hacen porque saben el riesgo que corren dejando que la imaginación discurra por los libros, lo sediciosas que se vuelven las ficciones cuando el lector coteja la libertad que las hace posibles y que en ellas se ejerce, con el oscurantismo y el miedo que lo acechan en el mundo real. Lo quieran o no, lo sepan o no, los fabuladores, al inventar historias, propagan la insatisfacción, mostrando que el mundo está mal hecho, que la vida de la fantasía es más rica que la de la rutina cotidiana. Esa comprobación, si echa raíces en la sensibilidad y la conciencia, vuelve a los ciudadanos más difíciles de manipular, de aceptar las mentiras de quienes quisieran hacerles creer que, entre barrotes, inquisidores y carceleros viven más seguros y mejor.
La buena literatura tiende puentes entre gentes distintas y, haciéndonos gozar, sufrir o sorprendernos, nos une por debajo de las lenguas, creencias, usos, costumbres y prejuicios que nos separan. Cuando la gran ballena blanca sepulta al capitán Ahab en el mar, se encoge el corazón de los lectores idénticamente en Tokio, Lima o Tombuctú. Cuando Emma Bovary se traga el arsénico, Anna Karenina se arroja al tren y Julián Sorel sube al patíbulo, y cuando, en
el Sur, el urbano doctor Juan Dahlmann sale de aquella pulpería de la pampa a enfrentarse al cuchillo de un matón, o advertimos que todos los pobladores de Comala, el pueblo de Pedro Páramo, están muertos, el estremecimiento es semejante en el lector que adora a Buda, Confucio, Cristo, Alá o es un agnóstico, vista saco y corbata, chilaba, kimono o bombachas. La literatura crea una fraternidad dentro de la diversidad humana y eclipsa las fronteras que erigen entre hombres y mujeres la ignorancia, las ideologías, las religiones, los idiomas y la estupidez.
Como todas las épocas han tenido sus espantos, la nuestra es la de los fanáticos, la de los terroristas suicidas, antigua especie convencida de que matando se gana el paraíso, que la sangre de los inocentes lava las afrentas colectivas, corrige las injusticias o impone la verdad sobre las falsas creencias. Innumerables víctimas son inmoladas cada día en diversos lugares del mundo por quienes se sienten poseedores de verdades absolutas. Creíamos que, con el desplome de los imperios totalitarios, la convivencia, la paz, el pluralismo, los derechos humanos, se impondrían y el mundo dejaría atrás los holocaustos, genocidios, invasiones y guerras de exterminio. Nada de eso ha ocurrido. Nuevas formas de barbarie proliferan atizadas por el fanatismo y, con la multiplicación de armas de destrucción masiva, no se puede excluir que cualquier grupúsculo de enloquecidos redentores provoque un día un cataclismo nuclear. Hay que salirles al paso, enfrentarlos y derrotarlos.
No son muchos, aunque el estruendo de sus crímenes retumbe por todo el planeta y nos abrumen de horror las pesadillas que provocan. No debemos dejarnos intimidar por quienes quisieran arrebatarnos la libertad que hemos ido conquistando en la larga hazaña de la civilización. Defendamos la democracia liberal, que, con todas sus limitaciones, sigue significando el pluralismo político, la convivencia, la tolerancia, los derechos humanos, el respeto a la crítica, la legalidad, las elecciones libres, la alternancia en el poder, todo aquello que nos ha ido sacando de la vida feral y acercándonos -aunque nunca llegaremos a alcanzarla- a la hermosa y perfecta vida que finge la literatura, aquella que sólo inventándola, escribiéndola y leyéndola podemos merecer. Enfrentándonos a los fanáticos homicidas defendemos nuestro derecho a soñar y a hacer nuestros sueños realidad.
En mi juventud, como muchos escritores de mi generación, fui marxista y creí que el socialismo sería el remedio para la explotación y las injusticias sociales que arreciaban en mi país, América Latina y el resto del Tercer Mundo. Mi decepción del estatismo y el colectivismo y mi tránsito hacia la democracia, el demócrata y el liberal que soy -que trato de ser- fue largo, difícil, y se llevó a cabo despacio y a raíz de episodios como la conversión de la Revolución Cubana, que me había entusiasmado al principio, al modelo autoritario y vertical de la Unión Soviética, el testimonio de los disidentes que conseguía escurrirse entre las alambradas del Gulag, la invasión de Checoeslovaquia por los países del Pacto de Varsovia, y gracias a pensadores como Raymond Aron, Jean-François Revel, Isaiah Berlin y Karl Popper, a quienes debo mi revalorización de la cultura democrática y de las sociedades abiertas. Esos maestros fueron un ejemplo de lucidez y gallardía cuando la inteligencia de Occidente parecía, por frivolidad u oportunismo, haber sucumbido al hechizo del socialismo soviético, o, peor todavía, al aquelarre sanguinario de la revolución cultural china.
De niño soñaba con llegar algún día a París porque, deslumbrado con la literatura francesa, creía que vivir allí y respirar el aire que respiraron Balzac, Stendhal, Baudelaire, Proust, me ayudaría a convertirme en un verdadero escritor, que si no salía del Perú sólo sería un seudo escritor de días domingos y feriados. Y la verdad es que debo a Francia, a la cultura francesa, enseñanzas inolvidables, como que la literatura es tanto una vocación como una disciplina, un trabajo y una terquedad. Viví allí cuando Sartre y Camus estaban vivos y escribiendo, en los años de Ionesco, Beckett, Bataille y Cioran, del descubrimiento del teatro de Brecht y el cine de Ingmar Bergman, el TNP de Jean Vilar y el Odéon de Jean Louis Barrault, de la Nouvelle Vague y le Nouveau Roman y los discursos, bellísimas piezas literarias, de André Malraux, y, tal vez, el espectáculo más teatral de la Europa de aquel tiempo, las conferencias de prensa y los truenos olímpicos del general de Gaulle. Pero, acaso, lo que más le agradezco
a Francia sea el descubrimiento de América Latina.
Allí aprendí que el Perú era parte de una vasta comunidad a la que hermanaban la historia, la geografía, la problemática social y política, una cierta manera de ser y la sabrosa lengua en que hablaba y escribía. Y que en esos mismos años producía una literatura novedosa y pujante. Allí leí a Borges, a Octavio Paz, Cortázar, García Márquez, Fuentes, Cabrera Infante, Rulfo, Onetti, Carpentier, Edwards, Donoso y muchos otros, cuyos escritos estaban revolucionando la narrativa en lengua española y gracias a los cuales Europa y buena parte del mundo descubrían que América Latina no era sólo el continente de los golpes de Estado, los caudillos de opereta, los guerrilleros barbudos y las maracas del mambo y el chachachá, sino también ideas, formas artísticas y fantasías literarias que trascendían lo pintoresco y hablaban un lenguaje universal.
De entonces a esta época, no sin tropiezos y resbalones, América Latina ha ido progresando, aunque, como decía el verso de César Vallejo, todavía Hay, hermanos, muchísimo que hacer. Padecemos menos dictaduras que antaño, sólo Cuba y su candidata a secundarla, Venezuela, y algunas seudodemocracias populistas y payasas, como las de Bolivia y Nicaragua. Pero en el resto del continente, mal que mal, la democracia está funcionando, apoyada en amplios consensos populares, y, por primera vez en nuestra historia, tenemos una izquierda y una derecha que, como en Brasil, Chile, Uruguay, Perú, Colombia, República Dominicana, México y casi todo Centroamérica, respetan la legalidad, la libertad, la crítica, las elecciones y la renovación en el poder. Ése es el buen camino y, si persevera en él, combate la insidiosa corrupción y sigue integrándose al mundo, América Latina dejará por fin de ser el continente del futuro y pasará a serlo del presente.
Nunca me he sentido un extranjero en Europa, ni, en verdad, en ninguna parte. En todos los lugares donde he vivido, en París, en Londres, en Barcelona, en Madrid, en Berlín, en Washington, Nueva York, Brasil o la República Dominicana, me sentí en mi casa. Siempre he hallado una querencia donde podía vivir en paz y trabajando, aprender cosas, alentar ilusiones, encontrar amigos, buenas lecturas y temas para escribir. No me parece que haberme convertido, sin proponérmelo, en un ciudadano del mundo, haya debilitado eso que llaman "las raíces", mis vínculos con mi propio país -lo que tampoco tendría mucha importancia-, porque, si así fuera, las experiencias peruanas no seguirían alimentándome como escritor y no asomarían siempre en mis historias, aun cuando éstas parezcan ocurrir muy lejos del Perú.
Creo que vivir tanto tiempo fuera del país donde nací ha fortalecido más bien aquellos vínculos, añadiéndoles una perspectiva más lúcida, y la nostalgia, que sabe diferenciar lo adjetivo y lo sustancial y mantiene reverberando los recuerdos. El amor al país en que uno nació no puede ser obligatorio, sino, al igual que cualquier amor, un movimiento espontáneo del corazón, como el que une a los amantes, a padres e hijos, a los amigos entre sí.
Al Perú yo lo llevo en las entrañas porque en él nací, crecí, me formé, y viví aquellas experiencias de niñez y juventud que modelaron mi personalidad, fraguaron mi vocación, y porque allí amé, odié, sufrí y soñé. Lo que en él ocurre me afecta más, me conmueve y exaspera más que lo que sucede en otras partes. No lo he buscado ni me lo he impuesto, simplemente es así. Algunos compatriotas me acusaron de traidor y estuve a punto de perder la ciudadanía cuando, durante la última dictadura, pedí a los gobiernos democráticos del mundo que penalizaran al régimen con sanciones diplomáticas y económicas, como lo he hecho siempre con todas las dictaduras, de cualquier índole, la de Pinochet, la de Fidel Castro, la de los talibanes de Afganistán, la de los imanes de Irán, la del apartheid de Africa del Sur, la de los sátrapas uniformados de Birmania (hoy Myanmar).
Y lo volvería a hacer mañana si -el destino no lo quiera y los peruanos no lo permitan- el Perú fuera víctima una vez más de un golpe de estado que aniquilara nuestra frágil democracia. Aquella no fue la acción precipitada y pasional de un resentido, como escribieron algunos polígrafos acostumbrados a juzgar a los demás desde su propia pequeñez. Fue un acto coherente con mi convicción de que una dictadura representa el mal absoluto para un país, una fuente de brutalidad y corrupción y de heridas profundas que tardan mucho en cerrar, envenenan su futuro y crean hábitos y prácticas malsanas que se proliferan a lo largo de las generaciones demorando la reconstrucción democrática. Por eso, las dictaduras deben ser combatidas sin contemplaciones, por todos los medios a nuestro alcance, incluidas las sanciones económicas. Es lamentable que los gobiernos democráticos, en vez de dar el ejemplo, solidarizándose con quienes, como las Damas de Blanco en Cuba, los resistentes venezolanos, o Aung San Suu Kyi y Liu Xiaobo, que se enfrentan con temeridad a las dictaduras que sufren, se muestren a menudo complacientes no con ellos sino con sus verdugos. Aquellos valientes, luchando por su libertad, también luchan por la nuestra.
Un compatriota mío, José María Arguedas, llamó al Perú el país de "todas las sangres". No creo que haya fórmula que lo defina mejor. Eso somos y eso llevamos dentro todos los peruanos, nos guste o no: una suma de tradiciones, razas, creencias y culturas procedentes de los cuatro puntos cardinales. A mí me enorgullece sentirme heredero de las culturas prehispánicas que fabricaron los tejidos y mantos de plumas de Nazca y Paracas y los ceramios mochicas o incas que se exhiben en los mejores museos del mundo, de los constructores de Machu Picchu, el Gran Chimú, Chan Chan, Kuelap, Sipán, las huacas de La Bruja y del Sol y de la Luna.
Y de los españoles que, con sus alforjas, espadas y caballos, trajeron al Perú a Grecia, Roma, la tradición judeo-cristiana, el Renacimiento, Cervantes, Quevedo y Góngora, y a la lengua recia de Castilla que los Andes dulcificaron. Y de que con España llegara también el África con su reciedumbre, su música y su efervescente imaginación a enriquecer la heterogeneidad peruana. Si escarbamos un poco descubrimos que el Perú, como el Aleph de Borges, es en pequeño formato el mundo entero. ¡Qué extraordinario privilegio el de un país que no tiene una identidad porque las tiene todas!
La conquista de América fue cruel y violenta, como todas las conquistas, desde luego, y debemos criticarla, pero sin olvidar, al hacerlo, que quienes cometieron aquellos despojos y crímenes fueron, en gran número, nuestros bisabuelos y tatarabuelos, los españoles que fueron a América y allí se acriollaron, no los que se quedaron en su tierra. Aquellas críticas, para ser justas, deben ser una autocrítica. Porque, al independizarnos de España, hace doscientos años, quienes asumieron el poder en las antiguas colonias, en vez de redimir al indio y hacerle justicia por los antiguos agravios, siguieron explotándolo con tanta codicia y ferocidad como los conquistadores, y, en algunos países, diezmándolo y exterminándolo.
Digámoslo con toda claridad: desde hace dos siglos la emancipación de los indígenas es una responsabilidad exclusivamente nuestra y la hemos incumplido. Ella sigue siendo una asignatura pendiente en toda América Latina. No hay una sola excepción a este oprobio y vergüenza.
Quiero a España tanto como al Perú y mi deuda con ella es tan grande como el agradecimiento que le tengo. Si no hubiera sido por España jamás hubiera llegado a esta tribuna, ni a ser un escritor conocido, y tal vez, como tantos colegas desafortunados, andaría en el limbo de los escribidores sin suerte, sin editores, ni premios, ni lectores, cuyo talento acaso -triste consuelo- descubriría algún día la posteridad. En España se publicaron todos mis libros, recibí reconocimientos exagerados, amigos como Carlos Barral y Carmen Balcells y tantos otros se desvivieron porque mis historias tuvieran lectores. Y España me concedió una segunda nacionalidad cuando podía perder la mía. Jamás he sentido la menor incompatibilidad entre ser peruano y tener un pasaporte español porque siempre he sentido que España y el Perú son el anverso y el reverso de una misma cosa, y no sólo en mi pequeña persona, también en realidades esenciales como la historia, la lengua y la cultura.
De todos los años que he vivido en suelo español, recuerdo con fulgor los cinco que pasé en la querida Barcelona a comienzos de los años setenta. La dictadura de Franco estaba todavía en pie y aún fusilaba, pero era ya un fósil en hilachas, y, sobre todo en el campo de la cultura, incapaz de mantener los controles de antaño. Se abrían rendijas y resquicios que la censura no alcanzaba a parchar y por ellas la sociedad española absorbía nuevas ideas, libros, corrientes de pensamiento y valores y formas artísticas hasta entonces prohibidos por subversivos. Ninguna ciudad aprovechó tanto y mejor que Barcelona este comienzo de apertura ni vivió una efervescencia semejante en todos los campos de las ideas y la creación. Se convirtió en la capital cultural de España, el lugar donde había que estar para respirar el anticipo de la libertad que se vendría. Y, en cierto modo, fue también la capital cultural de América Latina por la cantidad de pintores, escritores, editores y artistas procedentes de los países latinoamericanos que allí se instalaron, o iban y venían a Barcelona, porque era donde había que estar si uno quería ser un poeta, novelista, pintor o compositor de nuestro tiempo.
Para mí, aquellos años fueron inolvidables de compañerismo, amistad, conspiraciones y fecundo trabajo intelectual. Igual que antes París, Barcelona fue una Torre de Babel, una ciudad cosmopolita y universal, donde era estimulante vivir y trabajar, y donde, por primera vez desde los tiempos de la guerra civil, escritores españoles y latinoamericanos se mezclaron y fraternizaron, reconociéndose dueños de una misma tradición y aliados en una empresa común y una certeza: que el final de la dictadura era inminente y que el España democrática la cultura sería la protagonista principal.
Aunque no ocurrió así exactamente, la transición española de la dictadura a la democracia ha sido una de las mejores historias de los tiempos modernos, un ejemplo de como, cuando la sensatez y la racionalidad prevalecen y los adversarios políticos aparcan el sectarismo en favor del bien común, pueden ocurrir hechos tan prodigiosos como los de las novelas del realismo mágico. La transición española del autoritarismo a la libertad, del subdesarrollo a la prosperidad, de una sociedad de contrastes económicos y desigualdades tercermundistas a un país de clases medias, su integración a Europa y su adopción en pocos años de una cultura democrática, ha admirado al mundo entero y disparado la modernización de España. Ha sido para mí una experiencia emocionante y aleccionadora vivirla de muy cerca y a ratos desde adentro. Ojalá que los nacionalismos, plaga incurable del mundo moderno y también de España, no estropeen esta historia feliz.
Detesto toda forma de nacionalismo, ideología -o, más bien, religión- provinciana, de corto vuelo, excluyente, que recorta el horizonte intelectual y disimula en su seno prejuicios étnicos y racistas, pues convierte en valor supremo, en privilegio moral y ontológico, la circunstancia fortuita del lugar de nacimiento. Junto con la religión, el nacionalismo ha sido la causa de las peores carnicerías de la historia, como las de las dos guerras mundiales y la sangría actual del Medio Oriente. Nada ha contribuido tanto como el nacionalismo a que América Latina se haya balcanizado, ensangrentado en contiendas y litigios insensatos y derrochado astronómicos recursos en comprar armas en vez de construir escuelas, bibliotecas y hospitales.
No hay que confundir el nacionalismo de orejeras y su rechazo del "otro", siempre semilla de violencia, con el patriotismo, sentimiento sano y generoso, de amor a la tierra donde uno vio la luz, donde vivieron sus ancestros y se forjaron los primeros sueños, paisaje familiar de geografías, seres queridos y ocurrencias que se convierten en hitos de la memoria y escudos contra la soledad. La patria no son las banderas ni los himnos, ni los discursos apodícticos sobre los héroes emblemáticos, sino un puñado de lugares y personas que pueblan nuestros recuerdos y los tiñen de melancolía, la sensación cálida de que, no importa donde estemos, existe un hogar al que podemos volver.
El Perú es para mí una Arequipa donde nací pero nunca viví, una ciudad que mi madre, mis abuelos y mis tíos me enseñaron a conocer a través de sus recuerdos y añoranzas, porque toda mi tribu familiar, como suelen hacer los arequipeños, se llevó siempre la Ciudad Blanca con ella en su andariega existencia. Es la Piura del desierto, el algarrobo y el sufrido burrito, al que los piuranos de mi juventud llamaban "el pie ajeno" -lindo y triste apelativo-, donde descubrí que no eran las cigüeñas las que traían los bebes al mundo sino que los fabricaban las parejas haciendo unas barbaridades que eran pecado mortal. Es el Colegio San Miguel y el Teatro Variedades donde por primera vez vi subir al escenario una obrita escrita por mí. Es la esquina de Diego Ferré y Colón,
En el Miraflores limeño -la llamábamos el Barrio Alegre-, donde cambié el pantalón corto por el largo, fumé mi primer cigarrillo, aprendí a bailar, a enamorar y a declararme a las chicas. Es la polvorienta y temblorosa redacción del diario La Crónica donde, a mis dieciséis años, velé mis primeras armas de periodista, oficio que, con la literatura, ha ocupado casi toda mi vida y me ha hecho, como los libros, vivir más, conocer mejor el mundo y frecuentar a gente de todas partes y de todos los registros, gente excelente, buena, mala y execrable. Es el Colegio Militar Leoncio Prado, donde aprendí que el Perú no era el pequeño reducto de clase media en el que yo había vivido hasta entonces confiado y protegido, sino un país grande, antiguo, enconado, desigual y sacudido por toda clase de tormentas sociales.
Son las células clandestinas de Cahuide en las que con un puñado de sanmarquinos preparábamos la revolución mundial. Y el Perú son mis amigos y amigas del Movimiento Libertad con los que por tres años, entre las bombas, apagones y asesinatos del terrorismo, trabajamos en defensa de la democracia y la cultura de la libertad.
El Perú es Patricia, la prima de naricita respingada y carácter indomable con la que tuve la fortuna de casarme hace 45 años y que todavía soporta las manías, neurosis y rabietas que me ayudan a escribir. Sin ella mi vida se hubiera disuelto hace tiempo en un torbellino caótico y no hubieran nacido Álvaro, Gonzalo, Morgana ni los seis nietos que nos prolongan y alegran la existencia. Ella hace todo y todo lo hace bien. Resuelve los problemas, administra la economía, pone orden en el caos, mantiene a raya a los periodistas y a los intrusos, defiende mi tiempo, decide las citas y los viajes, hace y deshace las maletas, y es tan generosa que, hasta cuando cree que me riñe, me hace el mejor de los elogios: "Mario, para lo único que tú sirves es para escribir".
Volvamos a la literatura. El paraíso de la infancia no es para mí un mito literario sino una realidad que viví y gocé en la gran casa familiar de tres patios, en Cochabamba, donde con mis primas y compañeros de colegio podíamos reproducir las historias de Tarzán y de Salgari, y en la Prefectura de Piura, en cuyos entretechos anidaban los murciélagos, sombras silentes que llenaban de misterio las noches estrelladas de esa tierra caliente. En esos años, escribir fue jugar un juego que me celebraba la familia, una gracia que me merecía aplausos, a mí, el nieto, el sobrino, el hijo sin papá, porque mi padre había muerto y estaba en el cielo. Era un señor alto y buen mozo, de uniforme de marino, cuya foto engalanaba mi velador y a la que yo rezaba y besaba antes de dormir.
Una mañana piurana, de la que todavía no creo haberme recobrado, mi madre me reveló que aquel caballero, en verdad, estaba vivo. Y que ese mismo día nos iríamos a vivir con él, a Lima. Yo tenía once años y, desde entonces, todo cambió. Perdí la inocencia y descubrí la soledad, la autoridad, la vida adulta y el miedo. Perdí la inocencia, mi salvación fue leer, leer los buenos libros, refugiarme en esos mundos donde vivir era exaltante, intenso, una aventura tras otra, donde podía sentirme libre y volvía a ser feliz. Y fue escribir, a escondidas, como quien se entrega a un vicio inconfensable, a una pasión prohibida. La literatura dejó de ser un juego. Se volvió una manera de resistir la adversidad, de protestar, de rebelarme, de escapar a lo intolerable, mi razón de vivir. Desde entonces y hasta ahora, en todas las circunstancias en que me he sentido abatido o golpeado, a orillas de la desesperación, entregarme en cuerpo y alma a mi trabajo de fabulador ha sido la luz que señala la salida del túnel, la tabla de salvación que lleva al náufrago a la playa.
Aunque me cuesta mucho trabajo y me hace sudar la gota gorda, y, como todo escritor, siento a veces la amenaza de la parálisis, de la sequía de la imaginación, nada me ha hecho gozar en la vida tanto como pasarme los meses y los años construyendo una historia, desde su incierto despuntar, esa imagen que la memoria almacenó de alguna experiencia vivida, que se volvió un desasosiego, un entusiasmo, un fantaseo que germinó luego en un proyecto y en la decisión de intentar convertir esa niebla agitada de fantasmas en una historia. "Escribir es una manera de vivir", dijo Flaubert. Sí, muy cierto, una manera de vivir con ilusión y alegría y un fuego chisporroteante en la cabeza, peleando con las palabras díscolas hasta amaestrarlas, explorando el ancho mundo como un cazador en pos de presas codiciables para alimentar la ficción en ciernes y aplacar ese apetito voraz de toda historia que al crecer quisiera tragarse todas las historias.
Llegar a sentir el vértigo al que nos conduce una novela en gestación, cuando toma forma y parece empezar a vivir con cuenta propia, con personajes que se mueven, actúan, piensan, sienten y exigen respeto y consideración, a los que ya no es posible imponer arbitrariamente una conducta, ni privarlos de su libre albedrío sin matarlos, sin que la historia pierda poder de persuasión, es una experiencia que me sigue hechizando como la primera vez, tan plena y vertiginosa como hacer el amor con la mujer amada, semanas y meses, sin cesar.
Al hablar de la ficción, he hablado mucho de la novela y poco del teatro, otra de sus formas excelsas. Una gran injusticia, desde luego. El teatro fue mi primer amor, desde que, adolescente, vi en el Teatro Segura, de Lima, la muerte de un viajante, de Arthur Miller, espectáculo que me dejó traspasado de emoción y me precipitó a escribir un drama con incas. Si en la Lima de los cincuenta hubiera habido un movimiento teatral habría sido dramaturgo antes que novelista. No lo había y eso debió orientarme cada vez más hacia la narrativa. Pero mi amor por el teatro nunca cesó, dormitó acurrucado a la sombra de las novelas, como una tentación y una nostalgia, sobre todo cuando veía alguna pieza subyugante.
A fines de los setenta, el recuerdo pertinaz de una tía abuela centenaria, la Mamaé, que, en los últimos años de su vida, cortó con la realidad circundante para refugiarse en los recuerdos y la ficción, me sugirió una historia. Y sentí, de manera fatídica, que aquella era una historia para el teatro, que sólo sobre un escenario cobraría la animación y el esplendor de las ficciones logradas. La escribí con el temblor excitado del principiante y gocé tanto viéndola en escena, con Norma
Aleandro en el papel de la heroína, que, desde entonces, entre novela y novela, ensayo y ensayo, he reincidido varias veces. Eso sí, nunca imaginé que, a mis setenta años, me subiría (debería decir mejor me arrastraría) a un escenario a actuar. Esa temeraria aventura me hizo vivir por primera vez en carne y hueso el milagro que es, para alguien que se ha pasado la vida escribiendo ficciones, encarnar por unas horas a un personaje de la fantasía, vivir la ficción delante de un público. Nunca podré agradecer bastante a mis queridos amigos, el director Joan Ollé y la actriz Aitana Sánchez Gijón, haberme animado a compartir con ellos esa fantástica experiencia (pese al pánico que la acompañó).
Ante temas como la trascendencia, el destino individual y colectivo, el alma, el sentido o el sinsentido de la historia, el más acá y el más allá del conocimiento racional.
Siempre me ha fascinado imaginar aquella incierta circunstancia en que nuestros antepasados, apenas diferentes todavía del animal, recién nacido el lenguaje que les permitía comunicarse, empezaron, en las cavernas, en torno a las hogueras, en noches hirvientes de amenazas -rayos, truenos, gruñidos de las fieras-, a inventar historias y a contárselas. Aquel fue el momento crucial de nuestro destino, porque, en esas rondas de seres primitivos suspensos por la voz y la fantasía del contador, comenzó la civilización, el largo transcurrir que poco a poco nos humanizaría y nos llevaría a inventar al individuo soberano y a desgajarlo de la tribu, la ciencia, las artes, el derecho, la libertad, a escrutar las entrañas de la naturaleza, del cuerpo humano, del espacio y a viajar a las estrellas.
Aquellos cuentos, fábulas, mitos, leyendas, que resonaron por primera vez como una música nueva ante auditorios intimidados por los misterios y peligros de un mundo donde todo era desconocido y peligroso, debieron ser un baño refrescante, un remanso para esos espíritus siempre en el quién vive, para los que existir quería decir apenas comer, guarecerse de los elementos, matar y fornicar. Desde que empezaron a soñar en colectividad, a compartir los sueños, incitados por los contadores de cuentos, dejaron de estar atados a la noria de la supervivencia, un remolino de quehaceres embrutecedores, y su vida se volvió sueño, goce, fantasía y un designio revolucionario: romper aquel confinamiento y cambiar y mejorar, una lucha para aplacar aquellos deseos y ambiciones que en ellos azuzaban las vidas figuradas, y la curiosidad por despejar las incógnitas de que estaba constelado su entorno. 12
Ese proceso nunca interrumpido se enriqueció cuando nació la escritura y las historias, además de escucharse, pudieron leerse y alcanzaron la permanencia que les confiere la literatura. Por eso, hay que repetirlo sin tregua hasta convencer de ello a las nuevas generaciones: la ficción es más que un entretenimiento, más que un ejercicio intelectual que aguza la sensibilidad y despierta el espíritu crítico. Es una necesidad imprescindible para que la civilización siga existiendo, renovándose y conservando en nosotros lo mejor de lo humano. Para que no retrocedamos a la barbarie de la incomunicación y la vida no se reduzca al pragmatismo de los especialistas que ven las cosas en profundidad pero ignoran lo que las rodea, precede y continúa. Para que no pasemos de servirnos de las máquinas que inventamos a ser sus sirvientes y esclavos. Y porque un mundo sin literatura sería un mundo sin deseos ni ideales ni desacatos, un mundo de autómatas privados de lo que hace que el ser humano sea de veras humano: la capacidad de salir de sí mismo y mudarse en otro, en otros, modelados con la arcilla de nuestros sueños.
De la caverna al rascacielos, del garrote a las armas de destrucción masiva, de la vida tautológica de la tribu a la era de la globalización, las ficciones de la literatura han multiplicado las experiencias humanas, impidiendo que hombres y mujeres sucumbamos al letargo, al ensimismamiento, a la resignación. Nada ha sembrado tanto la inquietud, removido tanto la imaginación y los deseos, como esa vida de mentiras que añadimos a la que tenemos gracias a la literatura para protagonizar las grandes aventuras, las grandes pasiones, que la vida verdadera nunca nos dará. Las mentiras de la literatura se vuelven verdades a través de nosotros, los lectores transformados, contaminados de anhelos y, por culpa de la ficción, en permanente entredicho con la mediocre realidad. Hechicería que, al ilusionarnos con tener lo que no tenemos, ser lo que no somos, acceder a esa imposible existencia donde, como dioses paganos, nos sentimos terrenales y eternos a la vez, la literatura introduce en nuestros espíritus la inconformidad y la rebeldía, que están detrás de todas las hazañas que han contribuido a disminuir la violencia en las relaciones humanas. A disminuir la violencia, no a acabar con ella. Porque la nuestra será siempre, por fortuna, una historia inconclusa. Por eso tenemos que seguir soñando, leyendo y escribiendo, la más eficaz manera que hayamos encontrado de aliviar nuestra condición perecedera, de derrotar a la carcoma del tiempo y de convertir en posible lo imposible.
Muchas gracias.
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10.08.2010
ノーベル文学賞、ペルーのマリオ・バルガス・リョサ氏に
Mario Vargas Llosa ganó el Premio Nobel de Literatura
20 años que son muchos años, hacía que no se habría esta puerta y decía un nombre que sonaba español
“El premio Nobel de Literatura 2,010 ha sido otorgado al escritor peruano Mario Vargas Llosa”
La sorpresa ha sido mayúscula ¿para qué engañarnos? porque de tanto ser favorito parecía que Mario Vargas Llosa no iba a lograr nunca que fuera su nombre el pronunciado. Pero la Academia sueca es experta en romper cualquier pronóstico y premia al escritor hispano peruano dicen por su cartografía de las estructuras del poder y sus mordaces imágenes sobre la resistencia, la revuelta y la derrota individual.
Premio Príncipe de Asturias, Premio Cervantes, académico de la real academia española, a sus 74 años Mario vargas Llosa es autor de La ciudad y los perros, La casa verde, Pantaleón y las visitadoras, La tía Julia y el escribidor o La fiesta del chivo
“Me plantee en serio la idea de ser escritor sólo cuando era estudiante universitario cuando me di cuenta que la literatura para mí era algo muy importante y que la idea de dedicar mi vida a otra cosa me resultaba deprimente, me resultaba desmoralizador”
Aspirante a la presidencia de Perú en 1,990, Vargas Llosa se ha despertado hoy en Nueva York a las 5:00 de la mañana para prepararse las clases que imparte en Princeton. No sabía que poco después le iba a atropellar un tren llamado Premio Nobel. “Cuando abrieron la puerta de la celda.., así comienza su próximo libro titulado “El sueño del Celta” “Cuando abrieron la puerta en Suecia” así titulamos nosotros esta crónica, una puerta que te lleva directamente a la gloria.
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9.27.2010
Béisbol y Barbacoa en Futakotamagawa 10月11日
10月11日休日
特別イベント!!
二子玉川で野球!とバーべーキューパーティー
08:00 東急田園都市線二子玉川駅集合。
(二子玉川駅は渋谷駅から各駅で6駅目、急行で2駅目)
09:00-11:00 世田谷区二子玉川野球場でゲーム。
ゲームの後はバーべキューパーティー!
料金は一人1,500円! 安い!飲み放題、食べ放題!
バーべキューパーティーだけに来る人は11:30二子玉川駅集合。
9.23.2010
9.16.2010
Academias de sushi "se comen" Japón
Caminando por las calles de Tokyo Mathtías Weise se parece a cualquier otro turista en Japón pero este aleman esta aquí con un propósito claro, dominar un arte culinario japonés
En la academia de sushi de tokyo entrenan a la próxima generación de chefs.
La primera lección asegurarse que el cuchillo esté bien afilado.
Ir a Japón para aprender la técnica del sushi es algo cada vez más popular, en esta clase 7 de los 13 alumnos son extranjeros
“En el pasado muchos asiáticos venían a Europa para aprender por ejemplo como hacer pan, ahora es al revés vamos a Asia para aprender su cocina que es muy rápida muy fresca y muy buena
En la cocina demostrando como hacer sushi y sashimi hay viejos maestros, el curso de 8 semanas cuesta más de 10,000 dólares
La presentación de los platos es fundamental las técnicas aprendidas aquí pueden ser lucrativas en sus paises
“En Italia es un negocio en auge, es una buena oportunidad porque es algo pionero”
Se estima que hay unos 25,000 restaurantes de sushi en el mundo
Mucha gente quiere darle variedad a su menú, franceses, chinos o de otro tipo agregando ingredientes y estilos japoneses
En la prueba final luchan contra el tiempo para demostrar que pueden hacer piezas de sushi rápidamente
Luego los aprendices visitan a profesionales para observarlos en acción, van con la esperanza de algún día abrir un restaurante propio para llevar al mundo el sabor del sushi japonés.
7.30.2010
Las japonesas son las más longevas y otras noticias
En 1 minuto
Bienvenidos, bbc mundo les presenta las noticias mas importantes del día en un minuto.
En estados Unidos continúa la polémica por la filtración en el sitio de internet wikileaks de miles de documentos secretos que acusan a la OTAN de matar a cientos de civiles en la guerra de Afganistan.
Washington condenó el incidente y aseguró que las revelaciones ponen en riesgo no solo la seguridad de EE.UU sino la vida de sus ciudadanos y sus aliados.
Los cancilleres de Europa aprobaron nuevas sanciones contra Irán como respuesta al programa nuclear de ese pais, entre las medidas se encuentra un freno a las inversiones en las industrias petrolera y gasífera iranies
En Cambodia un tribunal respaldado por la ONU sentenció a 35 años de prisión al ex jefe del estado del jemer rojo Kaing Guek Eav por crimenes de guerra y crimenes contra la humanidad, se trata del primer veredicto contra un miembro de los jemeres
Las japonesas son las mujeres que viven la mayor cantidad de años en el mundo afirma un estudio hecho en ese pais en promedio alcanzan los 86 años, la razón dicen los expertos es un estilo de vida saludable
7.13.2010
ペルー独立記念祭のお知らせ
サッカー&フットサルは、スペイン語圏で広く愛 されているス ポーツで、気軽に楽しめると共にスペイン語を話すラティーノ達も多く参加していますので、授業以外でスペイン語を話せるいいチャンスです。登録は不要で、 その都度場所代だけいただきます。国籍を問わず男性も女性も、和気あいあいとプレイしていますし、プレイ後はバーベキューなどで盛り上がりとても楽しいで すよ。お友達を誘っての参加も大歓迎です。
アカデミア・ ベガのスタッフと一緒に参加したい生徒さんは、ぜひ事前にメールでご相談ください。
info★esvega.com
189 Aniversario de la independencia de Perú
イベント名:!Vale un Peru! 2010!
日時:7月25日(日) AM11:00~PM19:30
場所:新木場 スタジオコースト
公式HP http://www.studio-coast.com/
出演アーティスト:Los Kalibres(レゲトン)
El Barrio Canta(サルサ)
La Familia Loli(クリオーリョ)
Asi es Mi Tierra(ペルー伝統音楽), etc.
7月28日のペルー独立記念日を祝うイベントです。
大人だけでなく、子供も楽しめるフィエスタ!
レゲトンや、ペルー伝統音楽、サルサあり☆
もちろん、ペルー料理も食べられます。
ペルーの魅力が満点!
7月25日は新木場スタジオコーストで決まり♪
東京湾納涼船2010!!
東京湾納涼船のお知らせ
今年も東京湾納涼船が開催されています♪♪
浜松町・竹芝を出発し、お台場の夜景を観覧しながら、東京湾を船で回ります。
船内では、様々なイベントが楽しめますよ♪
○開催日時 7月30日金曜日 18:50(19:15出港です)
○集合場所 JR浜松町駅
○料金 大人¥2,500
ゆかた姿なら、なんと¥1,000引き!
※お食事は別料金のチケット制です
予約制ですので、ご参加される方はお早めにご連絡ください(info@esvega.com)
よろしくお願いします。
お仕事帰りや学校帰りに、気軽に行ける都内クルーズ♪
お酒を飲みながら、ロマンチックな夏の夜を過ごしませんか?
公式HP: http://www.tokaikisen.co.jp/event/noryo2010/
各種イベントやフィエスタ、毎月行われているサッカー&フットサルの情報を発信するコーナーです。サッカー&フットサルは、スペイン語圏で広く愛されてい
るスポーツで、気軽に楽しめると共にスペイン語を話すラティーノ達も多く参加していますので、授業以外でスペイン語を話せるいいチャンスです。
登録は不要で、その都度場所代だけいただきます。国籍を問わず男性も女性も、和気あいあいとプレイしていますし、プレイ後はバーベキューなどで盛り上がりとても楽しいですよ。お友達を誘っての参加も大・大歓迎です。アカデミア・
ベガのスタッフと一緒に参加したい生徒さんは、ぜひ事前にメールでご相談ください。info@esvega.com
7.06.2010
FC el MATADOR SUMMER CAMP!!
日時:7月17日(土)~18日(日)
場所:森林公園 パーク キャンピング
山梨県北都留群小菅村4698
男性用、女性用コテージに泊まります
費用:¥15,000
人数:約50人(!!)
サッカーをしたり、バーベキューをしたり、温泉に行ったり!
男女混合のたのしいキャンプ♪
充実の一泊二日で出会いがあるかも・・・!
参加したい方はお早目に連絡をください!
サルサイベント!
EL secreto de sus ojos 瞳の奥の秘密
2010年アカデミー賞 最優秀外国語映画賞受賞作品のお知らせ
アルゼンチン、ブエノスアイレス。
ベンハミンは、長く働いていた刑事裁判所を辞め、夢だった小説家になろうと25年前に起こった殺人事件を元に小説を書き始める。そして、自らその事件の犯人を捜し出す。
小説を書きながら、過去の回想をするベンハミンは忘れられない女性を思い出し、抑え込んでいた過去と向き合い始めることとなる。
8月より上映!
監督・共同脚本・編集:フアン・ホセ・カンパネルラ
制作年:2009年
制作国:スペイン=アルゼンチン(原題「el secreto de sus ojos」)
上映時間:2時間9分
上映館:TOHO シネマズ シャンテ(日比谷・有楽町)
http://www.tohotheater.jp/
公式ブログ:
http://www.elsecretodesusojos.com/
6.29.2010
6.24.2010
Dos dias para antiguos amores
Dos días para antiguos amores
Sin remordimientos ni acusaciones de infidelidad, es el momento del año en que cientos de personas peregrinan a este pueblo de montaña muy cerca de la frontera con China para encontrarse con sus ex- amantes.
la caminata puede ser cuesta arriba pero para algunos vietnamitas bien vale la pena el esfuerzo.
La pequeña aldea de Khau Vai se transforma durante dos días en el mercado del amor
De acuerdo con la leyenda una chica muy bella se enamoró de un joven de una etnia rival pero los miembros de la aldea se negaron a que se casara con él. Para evitar un conflicto entre sus pueblos la pareja decidió separarse y a escondidas acordaron verse en secreto una vez al año en este remoto lugar.
Hoy en día la tradición se mantiene viva, las parejas de casados hacen el viaje juntas para separarse durante el evento en busca de sus antiguos amantes
La noche cae y son las canciones que les ayudan al reencuentro
“Mi antiguo amor vino hoy, ya quedamos en vernos aquí aparecerá dentro de poco quedamos a eso de las 22:00, nos reunimos para recordar el tiempo en que estuvimos juntos y enamorados”
Con el paso del tiempo esta tradición de amores ocultos es mucho más abierta
“Ahora las generaciones más jóvenes van juntas y quedan en encontrarse en un punto determinado todo es más moderno, más libre, más claro, en la época de nuestros abuelos se tenía que buscar a ese amor en secreto”,
las parejas no sólo son las únicas que se han modernizado, hoy en día hay carreteras que facilitan el camino hasta esta aldea Khau Vai cuyo nombre significa nubes entre las montañas.
6.22.2010
映画「闇の列車、光の旅」のご紹介
32歳という若さにも関わらず、全世界から注目されている新鋭キャリー・ジョージ・フクナガが監督した『闇の列車、光の旅』。俳優ガエル・ガルシア・ベルナスやディエゴ・ルナも制作に携わっている。
ホンジュラスから来た少女サイラと、メキシコの青年カスペルはある事件をきっかけにアメリカに向かう列車で旅を供にする。その事件からカスペルは仲間のギャングから追われ、サイラは彼に対し少しずつ恋心を持つようになる。2人はアメリカ国境を命がけで越えようとする。果たして、見えない絆で結ばれた彼らにどのような結末が待っているのだろうか。
中南米の移民の今を写したこの作品は、サンダンス映画祭では監督賞を受賞するなど、映画界で多大な評価を受けている。
監督:キャリー・ジョージ・フクナガ
政策総指揮:ガエル・ガルシア・ベルナス、ディエゴ・ルナ他
制作国:2009年 アメリカ、メキシコ合作映画 (原題「Sin nombre」)
上映時間:1時間36分
上映館:TOHO シネマズ シャンテ(日比谷・有楽町)
http://www.tohotheater.jp/
公式ブログ:http://yami-hikari.com/
6.21.2010
Clavadistas en acción y retrato "al dente"
Clavadistas en acción y retrato "al dente"
Bienvenidos a BBC Mundo freak, el resumen de los videos más insólitos de la semana.
Comenzamos a las patadas, estos caballeros tan elegantes se preparan para una original contienda en ...................Inglaterra, el campeonato de patadas en la tibia. Los pateadores se protegen a la manera tradicional y se ajustan a unas reglas claras. El primero que tumba a su oponente a base de puntapiés gana. A pesar de todas las precausiones parece que de verdad duele.
En la zona arqueológica Chichen Itza en México, la tranquilidad de uno de los cenotes o pozos naturales más impresionantes se vió interrumpida por unos osados visitantes. Los mejores clavadistas de altura del mundo probaron su destreza en este paisaje privilegiado y se lanzaron al agua desde una plataforma de veintiséis metros a una velocidad de ochenta y cinco kilómetros por hora. Todo un espectáculo.
En el puesto número tres, un ejemplo de lo que entienden los ingleses por cocina italiana. Este es el homenaje de un artista británico al italianisimo Favio Capello, el director técnico de la selección de fútbol Inglaterra. El joven creador utilizó pasta de lasaña y salsa boloñesa para crear un fiel retrato del entrenador, inspirado según él en la comida italiana. Se nota que la dieta mediterránea no era lo suyo.
Una tarde soleada y un millar de asistentes recibieron en Sydney a la prestigiosa artista Laurie Anderson quién ofreció el primer concierto al aire libre para perros. Anderson hizo realidad su sueño de tocar frente a esta audiencia, y para ello compuso un repertorio con algunos sonidos solo perceptibles por oídos caninos. Y aunque confesó no saber si el público elegido disfrutó de la música hay que admitir que la función arrancó más de un ladrido.
La campeona de todas las abuelas, en el puesto número uno se llama Dorothy, es australiana y tiene solo cien años. Lleva cincuenta jugando al ping pong y con su toque maestro se ganó el corazón de la hinchada en el campeonato mundial de este deporte celebrado en China. La centenaria atleta se merece el cariño del público y mucho más.
Hasta aquí esta edición de BBC mundo freak, pero quédense con nosotros y vean más videos en BBC mundo com. Chau
6.09.2010
6.07.2010
Pingüinos futbolistas y la mujer tatuaje1
Pingüinos futbolistas y la mujer tatuaje
Hola comienza BBC MundoFreak, el ranking de los videos más insólitos de la semana.
En el número cinco, un salto sobre ruedas. Esta conmoción frente a la torre Eiffel en Paris la causó un solo hombre. El patinador francés, Taig Khris alimento la euforia y los nervios de la multitud que lo vio romper un récord Guinness al saltar cuarenta metros en patines. La primera vez cayó sentado, pero el segundo intento le salió perfecto.
Estas impresionantes imágenes no tienen efectos especiales. Fueron captadas por cazadores de tormentas California, EE.UU. Justo en el momento en que un tornado toca latierra. El fenómeno que no causó victimas fue un verdadero placer visual para los que gozan viviendo en el ojo de huracán.
Japón está listo para alentar a su selección en el mundial del fútbol de Sudáfrica. En un evento organizado en Tokio, los fans celebraron goles imaginarios. Y algunos lo hicieron desde lo más profundo de sus pulmones.
En Corea del sur, la fiebre del próximo mundial contagió hasta los pingüinos. Este es el puesto número dos. Once entusiastas jugadores encaenaron en un acuario cercano Seul, las esperanzas del triunfo de todo un país. Ciertamente los pingüinos fueron más tiernos que efectivos.
Pero llamaron la atención y con algún esfuerzo incluso lograron hacer rodar el balón.
Y en el número uno, una mujer que llava a los hombres en la piel. Julia Nuces es la mujer con más tatuajes del mundo. Casi no hay rincón de su cuerpo que no esté cubierto de ellos. Comenzó a tatuarse luego de ser diagnosticada con una tal enfermedad de la piel. Pero ahora lo hace por amor al arte. Chaplin y John Wayne están entre los inmortalizados en su tez aunque también le ha dado espacio a otro tipo de clásicos.
Hasta aquí el programa de esta semana, pero quédense con nosotros. Sigan viendo más videos en BBC Mundo.com. Hasta la proxíma.
6.05.2010
5.30.2010
Arte futbolero y boda de perros
Arte futbolero y boda de perros
Hola, esto es BBC Mundo Freak, el ranking de los videos más insólitos de la semana. Comenzamos con originales accesorios par futboleros. Se llaman makarapas y son los sombreros que todo buen hincha de fútbol sudafricano luce en la cancha. Los primeros que se fabricaron tenían una misión práctica, proteger a los fans de botellas voladoras y otros proyectiles, pero en este pequeño negocio familiar la decoración se convirtió en arte y ante la proximidad de la copa del mundo, los pinceles sacan chispas.
Un universo submarino único y de lana fue creado por ......... de tejedoras para un proyecto comunitario en el Reino Unido, las creadoras quieren demostrar que tejer no es solo una actividad de abuelas, también puede ser divertido
En el puesto número tres, mujeres de armas tomar.
En este mercado de artesanías de Lima, Perú. El ser andino se defiende con los puños. Qué mejor que una buena lucha con guantes y faldas coloridas para definir quiénes son las más andinas, las mujeres peruanas o las bolivianas. A pesar de los golpes la contienda se resolvió con un empate y mucha deportividad.
En esta feria de novias en Phoenix, EE,UU la competencia es dura, seis damas casaderas, un gran pastel de casamiento, y un anillo de diamantes escondido en su interior. ¿Qué no estaría dispuesta a hacer una futura novia para abaratar el costo de su boda?.
Y en el puesto número uno, el espiritu nupcial llevado al extremo, estos son los novios, Bruna y Lui, y viven en Río de Janeiro, sus propietarios gastaron más de ocho mil dólares en una fiesta de casamiento con todos los lujos, más de doscientos invitados, menú especial para perros y trajes hechos a mdedida para celebrar la unión canina. Los perritos dieron el sí, bueno el “guau” y ahora les espera la luna de miel.
Se imaginan ¿cómo será la fiesta cuando se casen los dueños?.
Aquí termina esta edición BBC Mundo Freak, pero no se vayan y sigan viendo más videos en BBC Mundo. Com. Chao
5.06.2010
Marcha de mascotas y escotes sísmicos
Marcha de mascotas y escotes sísmicos
Bienvenidos a BBC Mundo Freak, el resumen de videos más insólitos de la semana
Para empezar una concurrida manifestación de mascotas. Perros, gatos, conejos y dueños marcharon por la calles de Taipei en Taiwan, en defensa de los derechos de los animales con el objetivo de promover la adopción de perros y gatos callejeros. Las mascotas desfilaron con sus mejores galas, la cuestión es quién los defenderá del gusto de algunos dueños.
Desde Lituania llega una excelente idea para cinéfilos y deportistas, una sala de la capital Vilma, promueve lo que podría llamarse cine activo y es que aquí para disfrutar de la película hay que pedalear, el movimiento de ocho bicicletas fijas es el responsable de la energía que hace funcionar al proyector, obviamente los ciclistas voluntarios entran gratis.
En Toluca, México. El tamaño si que importa, aquí donde el equipo de fútbol local es conocido como Los choriceros, el desafío estaba claro crear el chorizo más largo del mundo. Los orgullosos choriceros esperan que el libro Guiness de los récords certifique su proeza, un chorizo de un kilómetro de largo que además pesa una tonelada.
Otra marca incluso más extravagante en el puesto número dos. ¿Qué puede surgir de la combinación de cientos de personas y cientos de pollos de plástico? El intento de marcar un récord, el de mayor cantidad de aves de goma lanzadas a la vez.
No sabemos cómo pasan el resto del domingo del año los habitantes de la localidad estadounidense de Massachussetts, pero quizás es mejor no saberlo.
Y en el puesto número uno, una respuesta original para un razonamiento insólito, un clérigo iraní asoció a las mujeres avergonzadas con el origen de los terremotos. La respuesta, una campaña por internet con el sugerente nombre de seno sismo y con el escote por bandera, un grupo de estudiantes de Indiana, EE.UU se reunió para medir los superpoderes de sus pechos, la tierra no se movió pero los ojos de los asistentes sí.
Hasta aquí unaestá edición de BBC Mundo Freak. Pero no se vayan, sigan viendo más videos en BBc Mundo. Com. Hasta la próxima.
4.30.2010
Hermanos yaipen Japan Tours (30 de abril, Tokyo....)
Hermanos Yaipen HP:
昨年のグルーポ5に引き続きペルーからHermanos Yaipenが初来日します。Combo Creacion、Los Kalibres、VictorTanamachiが前座です。
4月30日(金)神奈川公演
川崎CLUB CITTA'
22:00~翌5:00
1Fスタンディング ¥7,500
5月3日(月・祝)群馬公演
CLUB VIP'S
22:00~翌5:00
1Fスタンディング ¥7,500
4.20.2010
Gnomo gigante y concierto cósmico
Gnomo gigante y concierto cosmic
Bienvenidos a BBC Mundo Freak, el ranking de los videos más insólitos de la semana.
Para empezar les presento al enanito más grande del mundo. Un gnomo gigante es la nueva atración de los jardines de la universidad de Iowa en EE.UU. mide cuatro metros y medio, pesa ciento cincuenta y ocho kilos, y la verdad es que aunque dicen que los enanitos del jardín dan suerte a granjeros y jardineros éste de cerca lo que da es un poco de miedo.
Ni e-mail, ni chat ni una solicitud de la amistad de facebook, lo que este hombre y su hijo encontraron en la costa azúl de Australia es un mensaje en una botella. El hallazgo causó aún más sorpresa cuando supieron que la nota provenía de un pueblo en el centro de China y un masajista chino de su barrio les ayudó a traducirla y así descubrieron que el mensaje decía “¿te gustaría ser mi amigo?”. Lo que aún no saben es de qué manera responder.
Muchas cervezas y mucho tiempo libre en el puesto número tres.
El joven alemán Del Gebel decidió que la mejor manera de pasar el invierno era construyendo un apartamento sólo con posavasos de cerveza. Trabajó ocho horas diarias durante casi tres meses y utilizó trescientos mil cartones para marcar un récord guiness. Y para demostrar que se sostienen sin truco ni pegamento, que mejor que derribarlos. Lo que algunos se preguntan es cómo certificarán el número exacto de posavasos que usó.
La mayor estrella del deporte más popular de japón viene de Estonia tiene veinticinco años y antes de revitalizar con su encanto el tradicional circuito de lucha de Sumo fue portero de discoteca. Todos lo conocen como Baruto que en japonés quiere decir Mar Báltico, su fama no se debe solamente a sus dotes físicas o a su técnica. Sus muchas seguidoras destacan también su personalidad.
Y esta semana el puesto número uno, un cocierto de cámara espacial. La inmensidad del cosmos y quizás la estrechez de las cabinas de la estación espacial internacional inspiraron a los astronautas japoneses en este concierto espacial. Después de tan etéreo recital no resultó del todo fácil encontrolar la perfecta reverencia para saludar al público terrestre.
Y aquí termina esta edición de BBC Mundo Freak. Pero no se vayan, sigan viendo más videos en BBC Mundo . Com. Hasta la próxima.
4.14.2010
Gustar 動詞 「~~は好き」
- ¡Me gusta esta canción!
この歌が好き!
A mí también!
-私も!
- ¿Te gusta esta chaqueta?
- このジャケット好き?
- ¡Me gusta mucho!
- ええ、大好きです!
画像の上をクリークすると大きな画像が出ます
「私はパンを買います」というとき,
Yo compro el pan
「私」が主語,「パン」が直接目的語です;
しかし,「好き」という動詞のときでは逆に,
Me gusta el pan
「パン」が主語,好む人「私」が間接目的語になります:
gustarの使い方についてもう少し詳しく見ていくことにしましょう.
Me gusta el chocolate
私はチョコレートが好きです.
Me gustan las flores
私は花が好きです.
¿Te gusta la cerveza?
ビールは好き?
-Sí, me gusta mucho
-ええ,大好きです.
A nosotros nos gusta el pescado.
私たちは魚が好きです。
A nosotros nos gustan los animales.
私たちは動物が好きです。
A mí, a tí, a él, a ella,...と人称代名詞前置詞格を文頭に持って来ることがあります。
- 事実上の主語(好きである人)を明確にするため。
¿Le gusta la manzana?
¿Le gusta a usted la manzana? (あなたはりんごが好き?)
¿Le gusta a él la manzana? (彼はりんごが好き?)
¿Le gusta a ella la manzana? (彼女はりんごが好き?)
― 強調するために
A mí me gusta el fútbol
私はサッカーが好きです。
A nosotros nos gusta bailar
私たちは踊るのが好きです。
同じ活用で他の動詞は:interesar, apetecer, parecer, doler, importar, etc….